Como os decía días atras (y perdonad el retraso quienes seguís estos artículos viajeros), nuestro recorrido hacia la zona de los murales republicanos en Belfast lo hicimos a pie.

En el trayecto, pasamos junto a algunos de los pintados por los unionistas, como los de la zona de Lower Shankill que os mostraba en las fotos del 7 de este mes, el muro que separaba ambas comunidades y unos portones de hierro u acero, que se cerraban cada noche.

Al entrar en el barrio católico, observamos un grupo de borrachos sentados bajo una de las pintadas en la calle de Northumberland, que eludimos, y nos plantamos en Falls Road, justo frente a los murales de esta entrada.

El contenido de las obras es de carácter revolucionario, a diferencia de los anteriores, los de los unionistas.
No estábamos frente a unos murales que reflejaban un conflicto religiosos, sino de tipo social y político, si bien había otros de carácter cultural.

Los taxis negros que traían a los turistas desde el centro iban y venían continuamente. Sus ocupantes salían de los vehículos, hacían fotos y marchaban en pocos minutos.
Nosotros optamos por quedarnos un rato, pasear por el interior del barrio católico e incluso entrar a visitar la catedral de Saint Peter, cuyas dos torres podéis observar en la primera de las imágenes.