La escritora Najat El Hachmi explica cómo es su pueblo natal en el programa De vacances, de TV-3

Tradicionalmente, agosto es sinónimo de vacaciones. Por eso, las teles lo aprovechan para ofrecer programas de viajes, con los que combaten el calor asfixiante de las noticias más duras.
TV-3 ha repuesto Afers exteriors y, así, hemos visto de nuevo a Miquel Calçada pescando en un lago helado de Finlandia, tras hacer un agujero en el hielo con un enorme sacacorchos, y visitando a una luchadora médica en Tanzania. No son viajes de turisteo, no, y por ello se agradece la irónica retranca de Mikimoto.

Pero, ¿qué sería el verano de la nostra sin De vacances, programa que dirige y presenta la veterana Mònica Huguet. Siempre que veo a esta profesional, dedicada a coordinar estos miniespacios situados como una ligera brisa tras los Telenotícies , me pregunto dónde la ocultan sus jefes en las otras épocas del año.
Misterios empresariales al margen, el espacio incluye varios apartados, como Paisatges d’autor que protagonizan una veintena larga de creadores de diferentes disciplinas, entre ellos el fotógrafo mallorquín Toni Catany , que ha enseñado las partes menos turísticas de la isla, o el pintor Philip Stanton , que nos mostraba ayer las playas de Formentera.
Y para los más jóvenes están las Escapades a baix cost, que protagonizan con desenvoltura las reporteras Laia Mestre y Rosa Talamàs . En poco más de tres minutos, proponen escapadas mochileras: avión de bajo coste y alojamiento en albergues o pensiones. Esta semana han viajado a Fez y a Marrakech, en Marruecos.
También a este país nos condujo el lunes el primero de los Paisatges d’autor . La invitada y cicerone era Najat El Hachmi . La ganadora del último premio Ramon Llull con L’últim patriarca , colaboradora de EL PERIÓDICO , acompañaba al equipo del programa a su pueblo natal, en el norte de Marruecos, de donde salió cuando solo era una chiquilla de 8 años para venir a vivir a Catalunya.
En un momento dado, la escritora decía, casi asombrada. «Tengo la sensación de que todos estos espacios se han encogido «, pero luego ella misma admitía: «No se han encogido, es que yo me he hecho mayor «. Y Najat expresaba algo que les pasa a muchos emigrantes cuando inician un viaje a sus orígenes, ese encuentro y desencuentro que significa no ser de aquí, pero tampoco ser ya de allí.