Federico Jiménez Losantos, el director i presentador del programa de ràdio La Mañana, de la cadena COPE i columnista del diari El Mundo. ha encaixat molt malament el vídeo que els nois de la revista satírica El Jueves van penjar ahir a la seva divertida web. Els ha denunciat!
Potser no sigui afortunat dir que un tret del llavors grupet terrorista Terra Lliure va canviar totalment la seva forma de pensar (malgrat el seu passat esquerrà, ja havia anat virant cap a la dreta des de feia temps), però ««un gag és un gag», como defensa El jueves«.
Però com ja se sap, Federico té molt poc sentit de l’humor. Per això no m’estranya que els lectors d’aquesta publicació li hagin premiat.
Què com es diu el guardó? El Gilipollas del Año.
Etiqueta: el mundo
Federico Jiménez Losantos, el director y presentador del programa de radio La Mañana, de la cadena COPE y columnista del diario El Mundo. ha encajado muy mal el vídeo que los chicos de la revista satírica El Jueves colgaron ayer en su divertida web. ¡Les ha denunciado!
Quizá no sea afortunado decir que un tiro del entonces grupúsculo terrorista Terra Lliure cambió totalmente su forma de pensar (pese a su pasado izquierdista, ya había ido virando hacia la derecha desde hacía tiempo), pero «un gag es un gag», como defiende El jueves.
Pero como se sabe, Federico tiene muy poco sentido del humor. Por eso no me extraña que los lectores de esta publicación le hayan premiado.
¿Qué cómo se llama el galardón? El Gilipollas del Año.
Los MID, los dispositivos de internet móviles, están de moda.
Hace unos días lo publicaba El Mundo en su suplemento Ariadna (Intel lanza un procesador potente y diminuto para conectarse a internet, se titulaba la noticia) y también el Ciberpaís de El País (Llega el portátil ligero y barato).
Pero lo cierto es que semanas atrás, mi buen amigo Ángel Parra, informático de mi diario y fan de Linux, se había comprado a través de ebay un pequeño EeePC de Asus por menos de 300 euros. Ahora está jugando con sus posibilidades.
No tiene disco duro interno: sólo usa memoria como los lápices usb, de varios gigas, y en caso de necesidad (fotos, vídeos) hay discos duros externos por cuatro chavos.
¿Para qué se necesita más? Puedes navegar por internet y consultar tu correo (Gmail o Yahoo te permite tener almacenados varios gigas de mensajes) con un aparatito del tamaño de una libreta y menos de un kilo de peso.
Y lo mejor: sin Windows de ningún tipo. Lleva Linux, un sistema operativo libre y gratuito, tan fácil de utilizar como el XP o el Vista.
No m’agrada la utilització de càmeres ocultes per a incloure-les en un reportatge periodístic.
El cas més recent ha estat el d’en Mikel Epalza, cura basc de la diòcesi de Baiona gravat, segons afirma el mossèn, sense el seu coneixement i autorització per un equip d’El Mundo TV per a un reportatge emès per Antena 3 TV.
Existeix una cosa que es diu ètica: escolti, jo sóc periodista… vol respondre públicament al que jo li pregunto? I si em diu que no, doncs és que no… i si demana que la seva resposta sigui «of the record», o sigui, fora d’enregistrament, doncs se li ha de respectar.
Aquesta altra forma de periodisme, la de la càmera amagada, potser sigui l’única manera d’assolir proves contra uns delinqüents o contra uns pocavergonyes, però aquest no és el nostre treball. Potser ho sigui dels espies o els policies, però no el dels periodistes.
No me gusta la utilización de cámaras ocultas para incluirlas en un reportaje periodístico.
El caso más reciente ha sido el de Mikel Epalza, cura vasco de la diócesis de Baiona grabado, según afirma el sacerdote, sin su conocimiento y autorización por un equipo de El Mundo TV para un reportaje emitido por Antena 3 TV.
Existe algo que se llama ética: oiga, yo soy periodista… ¿quiere responder públicamente a lo que yo le pregunto? Y si me dice que no, pues es que no… y si pide que su respuesta sea «of the record», o sea, fuera de grabación, pues se le ha de respetar.
Esa otra forma de periodismo, la de la cámara escondida, quizá sea la única manera de lograr pruebas contra unos delincuentes o contra unos sinvergüenzas, pero ése no es nuestro trabajo. Quizá lo sea de los espías o los policías, pero no el de los periodistas.