Desde hace ya algún tiempo voy probando algunos de los sistemas operativos basados en software libre (free software), que no es lo mismo que gratuito (freeware), aunque «suele estar disponible gratuitamente en Internet».
El tema puede resultar complicado para cualquier novato en estas lides, sobre todo el porqué una familia puede evitar utilizar programas pirateados cuando, en realidad, puede utilizar programas totalmente legales, libres y gratuitos.
Benjamí Villoslada, un mallorquín experto en este tema, lo explica de una forma didáctica, sencilla y amena en un relato protagonizado por su propia familia, en el que cuenta lo difícil que resulta enfrentarse a un ordenador cargado… ¡¡¡con Windows!!!
Porque, cuando uno adquiere una máquina de éstas, en general viene sin nada más que el sistema operativo… Windows, por supuesto, y a veces, ni eso. Después hay que añadir todos los programas necesarios para hacerlo funcionar y, además, pagarlos.
Por eso, desde aquí animo a probar cualquiera de las distribuciones de Linux, que se pueden encontrar por unos pocos euros en cualquier revista o gratuitamente en internet, y a jugar con ellas porque, de verdad, hacerlo tiene también una parte lúdica y de rebeldía muy necesaria en estos días.
Que piensas sobre PCPal (www.pcpal.com), te gusta?