A raíz de mi anterior entrada en este diario, ha habido compañeros que me han dicho: «No es fácil dejar de fumar».
Estoy de acuerdo: cuando era fumador, lo intenté varias veces, y tres de ellas, más en serio: la primera vez, estuve sin fumar casi dos años; la segunda, nueve meses… la tercera fue la definitiva.
Josep Maria Ramon Torrell, jefe de servicio de la unidad de tabaquismo del Hospital de Bellvitge, decía este domingo en El País Semanal: «Si no lo quieres dejar, nosotros no podemos hacer nada».
Creo que ese «querer» dejarlo es básico. Porque, como yo mismo, pese a haberlo dejado hace ya cinco años, a veces tienes la tentación de volver a fumar un pitillo pensando que «por uno, no pasa nada»… Pero sí que pasa y recaes.
El mismo doctor Ramon, en La Contra de La Vanguardia de este lunes, daba un consejo:
hay que dejarlo de golpe, elegir un día y a partir de ese día, cero, «usted y el tabaco no vayan nunca juntos. ¡No compre, no pida, no dé, no guarde!»
This website uses cookies to improve your experience. We\'ll assume you\'re ok with this, but you can opt-out if you wish. Leer más
Deja una respuesta