Escribir es una liberación. La dificultad de ver lo escrito publicado en papel ha dado lugar a grandes frustraciones.
Por eso, la aparición democratizadora de las bitácoras, de los blogs, y la facilidad de uso de herramientas incluidas en Blogger o WordPress, por citar dos sitios, ha destapado miles de escritores, sin entrar en el resbaladizo terreno de la calidad o no de muchos de estos diarios.
Recientemente se ha hablado del poder terapeútico de la escritura en un taller impartido en el Centro Penitenciario de Jóvenes de La Trinitat, en Barcelona. Según se ha publicado, José, uno de los internos, escribe el blog Memorias cautivas. Y en el cine acaba de estrenarse Diarios de la calle, protagonizada por Hilary Swank, con un tema similar.
Los últimos premios 20 Blogs, del diario gratuito 20 minutos, acaban de galardonar a Daniel Díaz, un joven taxista de 29 años, autor de la bitácora Ni libre ni ocupado, descubriendo a un nuevo autor, de la misma forma que hicieron el año pasado con el Ezcritor.
En esta entrevista, Díaz explica que lee otros diarios y cita , y cita La decandencia del ingenio, por ejemplo; comenta que, para él, «el blog es el periodismo y el formato literario y visual del siglo XXI», y añade que «ningún blog tendría sentido sin el resto».
Tiene razón.