En estos días en que la situación económica de muchas familias es muy complicada, en que la palabra vacaciones puede significar un helado en la cafetería de la esquina, me apetece soñar.
Soñar es gratis y, de momento, no ha entrado en los planes de recortes del FMI, del Gobierno, del Govern i de la madre que les echó.
Así que leo con envidia el último boletín de Tripadvisor, en el que se apuntan «Los 10 destinos más tranquilos del mundo».
La lista la encabeza la región suiza del Jungfrau y la acaba Bhután, pero en medio aparecen: Laponia (Finlandia), Papúa-Nueva Guinea, Bora Bora, el Valle del Loira (Francia), las Seychelles, el Parque Nacional Jasper (Canadá), el Parque Nacional del Volcán Arenal (Costa Rica) y la isla Sur de Nueva Zelanda.
No está mal.
Bueno… Cuando me toque la lotería o expropiemos el primer banco, me apuntaré a alguna.