Vi por la tele la entrega de los premios Ondas y me alegré por los chicos de Polònia. Se han ganado a pulso su éxito de audiencia en la televisión catalana.
Un detalle que no se nos escapó a muchos fue ver cómo José Montilla miraba con buen humor a su alter ego, el Montilla interpretado por Sergi Mas, que ponía de manifiesto la parquedad de gestos y palabras del verdadero presidente de la Generalitat.
Manuel Campo Vidal lo comentaba ayer en su columna del diario gratuito ADN: «Montilla estaba en el palco y los ojos del público viajaban sin cesar entre uno y otro. Un pronóstico: Montilla, que ya se consolida solo, acabará sacado en hombros, porque pocos políticos aguantan sonriendo esa parodia. Es de agradecer».