Hace unos meses, en una semana de vacaciones, estuve recorriendo el centro de Francia (lo explico en la parte del blog, en Txerradas).
En esta zona, en plena Auvernia, en el departamento del Cantal, se encuentra una de las maravillas construidas por Gustave Eiffel: el semioculto viaducto de Garabit, un puente de hierro pintado de rojo, que sigue causando admiración.