Quería acabar la semana con unas pequeñas sugerencias para quienes os apetezca acercaros al Priorat, esa comarca catalana de excelentes vinos, de la que ya habréis visto algunas de las fotos que colgué hace unos días, sin tiempo para explicaros nada más.

Aunque hace años que frecuento Tarragona, y el Penedès en concreto, tenía ganas de visitar esa zona, por la que siempre he pasado deprisa.
El hecho de que una antigua compañera del diario, Isabel Vilà, hubiera cambiado de vida radicalmente, hace unos años, y se hubiera embarcado en la arriesgada aventura de abrir una casa de turismo rural, hacía más apetecible la excursión. Y en efecto, mereció la pena.
La casa de Isabel se llama Cal Porrerà y se encuentra en el pueblo de Porrera (el del cantante Lluís Llach y sus bodegas, en efecto).

Nosotros estuvimos estupendamente, pero como no soy objetivo, podéis encontrar referencias a la misma en Top Rural o en Enodestino, por ejemplo.
Tiene cuatro habitaciones, a cual más bonita, y aunque sólo ofrece desayunos (incluidos en el precio), permite utilizar la cocina. Además, hay suficientes restaurantes en el pueblo como para satisfacer a cualquiera.
Nuestra opción fue, precisamente, la de realizar una excursión durante el día y cenar luego en el pueblo. Lo hicimos en La Cooperativa, donde encontramos buenos platos y, lo mejor, un excelente vino del Priorat cobrado a precio de tienda, no de restaurante.
En cuanto a la excursión, de un solo día, optamos por una ruta circular: Porrera, Venta del Pubill, Poboleda, Escaladei (donde están los restos de la antigua Cartuja de Escaladei), La Morera de Montsant, Cornudella de Montsant y Siurana, uno de los pueblos más bonitos de la comarca, situado sobre un promontorio rocoso desde el que se domina una magnífica vista de las montañas de la sierra de Montsant y del río y el pantano de Siurana, situado a sus pies.
Antes de emprender el regreso hacia Porrera, en Siurana hicimos un alto para comer en el restaurante homónimo y donde, casualidades del destino, también se encontraba un exalto cargo de la televisión española con su pareja.
En esos casos, uno opta por «no conocer» al famoso de turno, qué le vamos a hacer.