Supongo que no digo nada nuevo si afirmo que Agustí Fancelli es un excelente periodista y crítico musical. Tiene numerosos premios en el bolsillo que así lo demuestran.
Pero, a veces, un currículum así no te sirve hasta que no encuentras un artículo que te lo hace descubrir: esto me ha pasado hoy con el texto de «Director, dictador» del 1 de mayo, en El País.
No lo había leído hasta ahora. Había mirado el diario de ese día por encima y había pasado por alto el artículo.
Hoy, mientras tiraba diarios a la papelera para reciclar, lo he visto y he empezado a leerlo con atención, primero, y con placer, después.
Fancelli explicaba de forma sencilla y didáctica la aparición de la figura del director de orquesta para comentar el problema de los directores/dictadores, como el desaparecido Herbert von Karajan o el recientemente dimitido Riccardo Muti.
Toda una clase magistral sobre música clásica… sin que llegue a parecer una clase magistral.